El sacrificio de la realidad: una reflexión intempestiva de la actualidad.

Donald Trump ha ganado, aunque casi todos los sondeos indicaban que ocurriría lo contrario. Pero mientras las encuestas no dejan de equivocarse, la mayoría se empeña en esperar que las estadísticas lo expliquen todo; entre otras cosas, por qué se está derrumbando la política, día tras día, a ritmo de espectáculo, escándalo y dinero. Ahora leo en una noticia que, tal vez, una de las razones que expliquen este batacazo de los sondeos haya venido de las falsas respuestas dadas por los encuestados, lo cuales, solo por la presión de la opinión pública habrían dicho que no votarían por Trump. Sea o no convincente esta hipótesis, no cabe duda, en cualquier caso, de que el peso de las estadísticas y de todo lo que pueda ser ofertado con un dato numérico, suele ser una constante que podemos apreciar en el ambiente de los análisis y debates políticos de nuestro tiempo. Sigue leyendo